jueves, 2 de diciembre de 2010


Porque entre el lunes y el martes, me sobra tiempo para necesitarte.
Porque me miento si digo, que tu mirada no fue mi mejor testigo.
Porque aunque ya no me duelas, a veces busco tu nombre en mi chistera.
Porque aún no vino el olvido, para llevarse el último de tus abrigos.
Por los besos que aún nos quedan en la boca
Porque fuimos lo que fuimos
Porque puesto a confesarte, aún le tengo miedo a tenerte delante.
Porque en cuanto me descuido, me atropella algún recuerdo en el pasillo
Porque no puedo negarte, que te quise sin querer y 
más que a nadie
Porque mi doctor previno, que para este corazón estás prohibido

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores